Repetimos, la Macrobiótica establece un patrón de salud. Genera energías vitales y la economía de las energías humanas,cuya materia prima de producción son básicamente:
1- los alimentos integrales orgánicos biológicos
2- el agua potable
3- la sal marina
¿Es el tiempo generacional entonces parte del determinismo? Por supuesto que no.
El tiempo está determinado, como hemos dicho, por el movimiento. Aún así –siguiendo con la medida del tiempo- podemos empezar a cambiar los padres para dar el ejemplo de ser felices a nuestros hijos ahora, ya mismo. Para lo cual no es necesario que tengamos que morir como generación.
Y para ser felices ahora tenemos que empezar a ser justos para entonces ser libres, para que nuestros hijos se alimenten de justicia y de libertad. Así eliminamos las culpas y podemos empezar a cambiar. ¿En cuánto tiempo?
Ya lo dijimos: en 10 días se renueva el plasma de la sangre. En 90 días se renuevan todas las células de los tejidos orgánicos y óseos. Es decir, en tres meses aparecerá una vitalidad nueva – la Nueva Vitalidad-. Es un inicio suficiente para cambiar notablemente el análisis crítico de la realidad y, a la vez, la pasiva resignación, la impotencia y la fatiga crónica social . Y la protesta se transformará en propuesta. Y estas propuestas irán creando las nuevas formas más justas de la realidad por las que se clama y reclama.
Para entonces...90 días después ya sabremos que no les podemos pedir a los que no tienen ni a los que no quieren porque no pueden o no saben... Este es el pantano de los límites humanos. Porque creen que van a poder antes de hacerse responsables de los cambios. Cuando llegan al poder recaen en los mismos ciclos y en las reiteradas incapacidades e incumplimientos de los deberes que aceptaron cumplir y no pueden. Porque no saben o porque no quieren. Esto es parte de nuestra crisis argentina.
Creemos que aquel “No juzguéis” de Nuestro Señor Jesucristo tiene mucho que ver con todo esto porque a la prostituta Magdalena no la pudieron apedrear porque nadie estaba libre. Porque Jesucristo sabía que no eran libres. Por eso a otros, en esta misma sabiduría, les dijo que ellos eran hijos de Satanás, el padre de la mentira y de todo mal.
La mentira es el núcleo de la conflictividad humana y a nuestros hijos no los podemos engañar. Ellos tarde o temprano van a descubrir que les hemos estado mintiendo y esto es un golpe irreparable. Es una marca y una herida difícil de curar. Ya hay más de 20 escuelas psicológicas. Todo hace presuponer que de continuar esto así -que todo siga siendo arrastrado por la corriente del mundo- se sumarán otras tantas escuelas psicológicas más...
Y la industria de los medicamentos -que en la sociedad de consumo es otra de las más grande y poderosa en comercialización y ganancias cuantiosas- seguirá produciendo miles de millones de pastillas, remedios y vacunas ...y seguirá habiendo las enfermedades, se reciclarán las viejas dolencias y epidemias y aparecerán otras nuevas –como ya ocurrió con la iatrogenia que es una especie de enfermedad que causan los medicamentos...para curar las enfermedades!-.
Mientras el desprestigio de la clase política es el comentario en voz alta y una reprobación que escuchamos diariamente, y la economía no alcanza a cubrir más que el 40% de nuestra población -el 60% restante vive en distintos grados de empobrecimiento hasta la desnutrición y el desamparo. Y todos en la inseguridad pública y la inflación.-.... los reclamos a la justicia ordinaria y a las instituciones se multiplican. A la vez, los reclamos más importantes son por la inseguridad y la delincuencia. Y a la clase política por la inflación y el desempleo.
Pero en síntesis, mientras se persiste en creer y esperar que el problema de la inseguridad depende de la policía, que la economía depende de la política y que el delincuente es un marginado económico y siga creciendo la desvalorización de los recursos humanos que, todos los hombres y mujeres, tenemos para la convivencia digna.....en la misma medida seguiremos errando y continuaremos errantes en el mismo pantano de las crisis cíclicas que nos siguen arrastrando. Y seguimos insistiendo en pedirles a los que no tienen, no quieren o no pueden.
Resumiendo: Está la mentira y la verdad. Mucho antes que el bien y el mal.
Si seguimos arrastrados por la mentira -especialmente por las propias formas de mentirnos a nosotros mismos, justificándonos todo el tiempo- y, desvalorizados, ponemos nuestras vidas en manos de otros ...que están estructurados dentro del mismo sistema que nos provoca la justa indignación y seguimos conformándonos con la crítica, el reclamo, la sospecha y las acusaciones en la pasiva incredulidad..... la Verdad seguirá sepultada, enterrada en la arrogancia de los egoísmos que nos encierran y oscurecen la posibilidad de ver lo que está ocurriendo o iniciar el camino de los cambios y de las transformaciones.
Sabemos -porque lo experimentamos, comprobamos y hemos sido testigos y protagonistas- de los cambios posibles y de las transformaciones necesarias porque hemos develado que no hemos nacido ni tarde ni lejos y que todo es posible y podemos. Y SE PUEDE con los mínimos recursos y los medios preexistentes.
Porque no nacimos tarde ni lejos. Porque vivenciamos que la paz no requiere, no se logra luchando contra la violencia y el odio. Ni la justicia se impone en la lucha contra la injusticia.
Porque tampoco el amor nace de la lucha contra el odio....
El único cambio posible de la crisis empieza con la paz y sigue en paz para implementar la justicia que todos nos debemos para vivir en la felicidad de ser libres.